Saludos a todos!
Con este tema, podría mencionar los peligros de Internet, el cyberbullying y mil cosas negativas más, pero considero que estamos todos más que concienciados e informados de todo eso. No hablaré tampoco sobre nuevos móviles, ni televisiones, ni nada. En su lugar, hablaré sobre mi opinión sobre las nuevas tecnologías, mi experiencia y mis creencias sobre ellas. Por supuesto, siéntanse libres de discordar, no dejan de ser al fin y al cabo, opiniones.
Albert Einstein decía: "Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad, entonces el mundo solo tendrá una generación de idiotas." Y con mi corta, pero intensa experiencia con las nuevas tecnologías, me atrevo a decir que ese día ha llegado.
Para comprobarlo, basta con salir a la calle: en todos los rincones encontraremos gente que, mirando los móviles, tecleando desorbitadamente, cruza pasos de peatones temerariamente, ignorando semáforos y posibles coches. Personas que quedan para verse, y después del cordial saludo se sientan a una mesa para volver a mirar sus centelleantes pantallas, claramente más interesantes que el amigo que tienen sentados enfrente. Llegamos incluso al colmo de la estupidez, donde esos dos amigos sentados, atentos a su móvil, se ríen a la vez: se están mandando mensajes entre sí. ¿Dónde se ha quedado entonces esa comunicación tan íntima como natural, tan humana? Hablo de miradas que sin palabras lo dicen todo, de gestos, de acciones. En vez de eso tenemos ahora las notas de voz, los emoticonos y el envío de vídeos.
No soy tan hipócrita como para atreverme a criticar a esta sociedad como si yo no fuera parte participante de ella, ni lo haré. También yo participo activamente en las más diversas redes sociales, algunas tan estúpidas como inútiles. Perdí ya la cuenta de las horas que he pasado mirando el móvil, las horas de estudio que he invertido en mi querido (y traicionero) whatsapp, o subiendo fotos a Facebook, leyendo tweets fútiles de gente que no me interesaba ni lo más mínimo. No puedo negar que, incluso a la hora de comer, "hablo" con mis amigos, familia, conocidos, etc.
Nos conectamos para no sentirnos solos, en vez de salir a la calle a conocer de verdad a los demás y a nosotros mismos, ya de paso. Nos gustan las redes sociales porque así podemos manipular la información expuesta creyendo que el resto es intimidad. Se nos olvida que para ser queridos de verdad (y no me refiero solo al amor), hay que dejar que nos vean tal y como somos. Hemos aprendido a tenerles pánico a las verdaderas relaciones humanas al verdadero contacto. Nos da miedo que nos descubran tal y como somos, nos da miedo esa situación en la que en medio de una conversación se nos escapa un gesto, que delata lo que realmente pensamos: nos asusta improvisar.
Pero a pesar de todo esto, las nuevas tecnologías no siempre son malas. Como inmigante que soy, me veo obligada a agradecerles todos sus avances y logros a Internet, a las redes sociales y a sus creadores. Gracias a ellos, puedo hablar con toda mi familia siempre que quiero, me puedo dar el lujo de llamar e incluso de hacer videollamadas a cualquier parte del mundo. Y obviamente, la alegría que eso me causa es infinita. Esa es una de las maravillas de la Globalización. Sobretodo si uno tiene el detalle de acordarse de que no hace más de 20 años, es decir, la generación misma de nuestros padre, no tuvieron esa suerte: si uno vivía lejos de casa, mandaba cartas, llamaba raras veces (los teléfonos eran más bien pocos, y las llamadas, caras) y se esperaba al día de volver a casa. Y debo decir que casi nada me da más satisfacción que poder ver en directo a alguien querido que esté en la punta contraria de otro continente, escuchar su voz y poder simplemente sonreír sabiendo que me está viendo. No es lo mismo que en vivo, pero está claro de que es, repito, una maravilla.
Sin embargo, hay algo que nunca me quito de la cabeza, algo que casi nunca tenemos en mente cuando nos conectamos a Internet, y es que todo, ABSOLUTAMENTE todo queda grabado... Y mi poblema es... ¿Dónde? ¿Quién es esa persona que contiene tanta información sobre mí, sobre nosotros, esa tan preciada intimidad de la que hablaba antes? Mi miedo es que toda la información guardada alguna que incluso nosotros mismos desconocemos, sea usada en nuestra contra. No es tan difícil, ni tampoco tan fuera de lo común: basta un pequeño giro político, algo mal guardado, lo que sea, y BUM! Nuestra información estará al servicio de desconocidos. Puede que, incluso lo esté ya. O puede que simplemente sea yo la que piense demasiado, o tenga mil paranoias sin resolver en mi cabeza...
La publicidad (no solo la que vemos claramente, sino también la que nos imponen sin que nos demos cuenta, los mensajes subliminales que nos ponen entre películas, páginas webs de cosas totalmente distintas...) es claramente un factor influyente en nuestra sociedad, presente en las nuevas tecnologías, con el fin de canalizarnos a que hagamos algo que probablemente antes ni soñabamos con tener. Salen de ahí obsesiones con tener el nuevísimo IPhone, el más reciente ordenador o cualquier cosa. Y también cualquier cosa les sirve para intentar manipular y masificar nuestras mentes: los anuncios tienen dentro otros anuncios(no solo publicitan un producto, sino varios que desconocemos si no nos fijamos bien), y a eso le unimos las películas, los móviles, la televisión y mil cosas más, veremos que nos intentan meter demasiada información desnecesaria, para su propio beneficio.
Sin embargo creo que, toda esta exageración alrededor de las tecnologías se debe a que vivimos en una sociedad que ha cambiado drásticamente en muy poco tiempo, una sociedad que aún no ha tenido tiempo de adaptarse a la convivencia con dichas tecnologías. Como un niño que recibe un cochepor su cumpleaños, y que le encanta tanto que pasa a ser su favorito, y lo lleva a todos lados con él, hasta que se harta y pasa a jugar tambíen con los demás juguetes. Creo y tengo esperanza de que esta sea una fase temporal y natural de adaptación, hasta que aprendamos a vivir con las tecnologías encontremos el equilibrio y se lo transmitamos así a las nuevas generaciones.
Dejo un vídeo que creo que expresa bien lo que pienso acerca de todo este tema:
No hay comentarios:
Publicar un comentario